
Lesiones de ligamentos
Descripción
Las lesiones de ligamentos, comúnmente conocidas como esguinces, ocurren cuando los ligamentos (bandas de tejido fibroso fuerte que conectan los huesos entre sí y estabilizan las articulaciones) se estiran, desgarran o rompen. Estas lesiones varían en gravedad, desde un estiramiento leve (grado I) hasta una rotura completa (grado III). Son frecuentes en articulaciones como el tobillo, la rodilla (ligamento cruzado anterior, ligamentos colaterales) y la muñeca, y suelen ser el resultado de movimientos bruscos, torsiones o impactos que fuerzan la articulación más allá de su rango de movimiento normal.
Causas
- Movimientos bruscos o torsiones
- Caídas
- Impactos directos durante actividades deportivas
- Sobrecarga o uso excesivo
Síntomas
- Dolor en la articulación afectada
- Hinchazón y hematoma
- Sensibilidad al tacto
- Limitación del movimiento o inestabilidad articular
- Sonido de 'chasquido' o 'pop' en el momento de la lesión
Complicaciones
- Inestabilidad articular crónica
- Dolor persistente
- Artrosis postraumática
- Debilidad muscular
Factores de Riesgo
- Participación en deportes de contacto o que implican giros y saltos
- Calentamiento inadecuado
- Uso de calzado inapropiado
- Antecedentes de lesiones ligamentarias
- Debilidad muscular
Estadísticas en México
En México, las lesiones ligamentarias de rodilla ocurren en 6 a 10 casos por cada mil habitantes anualmente. En hombres, los mecanismos de lesión más comunes son las actividades deportivas, mientras que en mujeres son las caídas. El 70% de los derrames en rodilla se asocian con lesiones del Ligamento Cruzado Anterior (LCA).